La Noche de la Cortesana

Cae la noche y ya te espero,
Y vienes con el manto del deseo,
Plagada con estrellas que invaden tu cuerpo...

 

Beso la mano de quien yo llamaba,
Dulce mujer viajera y cortesana,
Con labios de fuego,
Con alas de cuervo...

 

Pides pague el tributo de tu compañia,
Exiges entre en un beso un telanto de mi herida,
Desenvaino mi espada y la poso en mi mano,
La deslizo para cubrir con sangre tu manto...

 

Llamaste al deseo y yo vengo,
Vestida como mujer con ganas de sentirte dentro,
Ven pues y saciate de mi alma,
Que has pagado por tener a una cortesana...

 

Revelas tu pecho y me lo ofreces,
Dices: prueba del fruto prohibido, bien lo mereces,
Acerco mi boca y siento mi paladar ardiendo,
Es tu pecho lo que en un segundo me esta consumiendo...

 

Te mofas diciendo pobre niño, quisiste jugar al amor conmigo,
Sin saber que llamaste a la mujer equivocada,
Debiste quedarte con quien estaba en tu cama...

 

Volteo y te veo,
No puedo creerlo,
Pero eres tu durmiendo,
Decía aun durmiendo...

 

Desperté espantado y dudando,

si había sido un sueño

o la ultima vez que nos amamos, 

Fue como te había recordado,
Hacia años sin soñarte en mi cama,

hacia años que habías liberado tu alma...